Esta semana, y como no puede ser de otra manera, no encontramos con hechos que contradicen los dichos, es decir, hay hombres que se quieren dedicar a la política y para este fin utilizan casi cualquier medio y por lo general, como consecuencia de su poca o nula formación, incurren en contradicciones que si no fueran tan grotescas darían para un “sainete”
Soy, como saben abogado, los 29 de agosto en nuestro país se celebra nuestro día, conmemorando el natalicio de Juan Bautista Alberdi, quien nació en Tucumán en 1810; Juan Bautista fue un letrado, jurista, economista, diputado, escritor y músico, fue uno de los autores intelectuales de la Constitución Argentina de 1853, ni siquiera el mas importante, a mi modo de ver, el verdadero “Padre” de nuestra Constitución fue José Benjamín Gorostiaga, a modo de ejemplo la Constitución en su versión de 1853 tenía 107 artículos, de los cuales toda la doctrina (el preámbulo y la parte orgánica, es decir, el concepto de la división, función y la distribución de los tres poderes es de autoría exclusiva de Gorostiaga, quedando en duda quién fue el autor de la parte dogmática que constaba de 31 artículos.
Pero no es para abrir un debate sobre revisionismo.
Alberdi, podríamos decir ha tenido más “prensa”, que José Benjamín quedando el extraordinario santiagueño, reservado para los especialistas, este pequeño grupo de juristas que nos dedicamos a entender y a hacer entender "el contrato original", ese documento que nos generó como Nación y que luego de las modificaciones aceptaron a la provincia de Buenos Aires y ésta, cediendo la ciudad y la nacionalización del puerto, se incorporó a la República en 1860.
No pretendo quitarle mérito al tucumano autor de “Bases y puntos de Partida”, pero si somos justos, nuestra Constitución y ese texto derivan doctrinariamente de la Constitución Americana, escrita en 1787, de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, aprobada por la Asamblea Nacional Constituyente francesa el 26 de agosto de 1789, y sobre todo de “Las Constituciones de Anderson”, redactadas por el pastor James Anderson y por Jean Théophile Désaguliers, se aprobaron y se publicaron en 1723, y que no solo dieron bases a la Constitución de los Estados Unidos, fuente de la Constitución Argentina, sino fue la organizadora de la francmasonería.
Pero repito, no es mi intención hacer un “ensayo” histórico, sino comentar un hecho político.
Las ideas
“El liberalismo es una filosofía política y jurídica que defiende la libertad individual, la igualdad ante la ley, y una reducción del poder del Estado”.
La libertad individual, es un valor que tienen la mayoría de los Partidos Políticos que discurren por la República Argentina, pero el símbolo histórico de este concepto ha sido y sigue siendo la Unión Cívica Radical, igualmente la igualdad ante la ley ha sido la bandera histórica del Partido creado por Leandro N. Alem, en 1890, y que hemos mantenido los radicales bien alto y pagando muchas veces con la vida, la libertad personal en las cárceles de los gobiernos militares, que rompían el orden constitucional muchas veces, con la cínica excusa de que venían a imponer “el liberalismo”.
Nuestra diferencia con la definición clásica sería el concepto de la “reducción de Estado”, que, para nosotros los radicales , el Estado (la sociedad jurídicamente organizada”), es un instrumento que sirve para igualar derechos, mantener la libertad individual, a modo de ejemplo, es realmente extravagante que algunos que se dicen liberales aun defiendan conceptos enarbolados por quienes nos privaron de la libertad individual y de la igualdad ante la ley.
La argentina tiene entre sus ciudadanos hombres y mujeres que expresan el pensamiento “liberal”, de manera clara, inteligente , consistente y solo mantenemos alguna diferencia en el rol del Estado, pero es fácil de zanjar entre personas de bien, siendo ésta, la sociedad organizada bajo conceptos jurídicos comprensibles, y como fruto de la libre discusión en los cuerpos legislativos, no veo en lo personal problema alguno con el liberalismo expresado racionalmente, al contrario, propongo que su contribución más en estos momentos que vive el Pais, debe ser mucho más dinámica, junto a fuerzas que expresamos los mismos valores.
Lo grotesco.
Todas las ideas, los conceptos filosóficos tienen deformaciones o malformaciones, muchas veces es el fruto del legítimo debate, otras, las más ,son atajos que se toman, cuando la intención no es sumar inteligencia al debate, sino solo destruir lo existente, o para ser más claro, ser funcionales a los grupos que no desean el debate, que no vienen a la política a mejorar la vida de sus compatriotas, sino solo a depredar al Estado, estos grupos, son por “derecha” funcionales a cualquier consideración racional de oposición ,en este caso al kirchnerismo, que es como decimos en estas columnas: una deformación dramática del peronismo como idea y concepto.
La argentina define a estos extremos como “libertarios”, su diferencia con los liberales, no es solo que el “Estado como tal no debe existir”, sino que la libertad individual sólo debe ser ejercida por ellos, no le reconocen al otro el derecho a ella, por lo tanto sus conceptos y discursos se circunscriben a una perorata sin sentido contra la “política” que es el medio por el cual la sociedad se organiza y en el caso de nuestro Pais cuestionan la manda constitucional que define a los Partidos como Instrumentos imprescindibles del sistema democrático.
NO vale la pena tratar de entender una patología, simplemente se la reconoce, pero hasta este puñado de individuos tienen derecho a expresarse, y lo hacen de manera grotesca.
Días pasados José Luis Espert, un licenciado en Economía, que logró Doctorados en el CEMA una Universidad fundada en 1978, de ideología Liberal, por decir algo, y que genera como toda unidad académica diferentes representantes, no voy a opinar sobre los doctorados logrados por el Señor Espert, no es mi punto, sino por su manera de dirigirse a la sociedad y sobre todo, su especial funcionalismo al gobierno más corrupto de la historia.
Columnista de Televisión, no se destacó por sus conocimientos, sino por una verborragia “arrabalera”, provocativa e insultante, que solo esconde su fragilidad intelectual, pero esto tampoco seria un problema, todos sabemos que la exigencia académica en las instituciones privadas, son más económicas que curriculares, uno logra aprobar un examen, lo que haga con su vida ya no es responsabilidad de la Institución.
Espert junto a un señor llamado Milei y un periodista de apellido Rosales, insisten en un “armado”, esta vez legislativo ya que en el intento presidencial la dupla Espert- Rosales, a pesar del extraordinario apoyo publicitario, de los Medios periodísticos, no logró superar a los votos recurridos.
Su última aparición pública fue en la provincia de Mendoza, donde reunió un pequeño grupo de jóvenes, que son por la propia naturaleza humana los más permeables a las ideas extremas, en los setenta éramos los herederos del Mayo Francés, hoy son los televidentes de los programas de opinión tipo Intratables o Animales Sueltos, pienso que lo nuestro fue al menos más poético, “la imaginación al Poder”, frente al “Cornejo puto”, de Espert, sin duda hay una diferencia intelectual inmensa.
Quería hacer estas breves reflexiones, desde el pensamiento progresista: soy un radical que defiende la libertad individual , la igualdad ante la ley, que puede tener diferencias que no son insalvables con el concepto de la función del Estado, sobre todo en un Pais que tiene el 50% de la población debajo de la linea de la pobreza, con diferencias socioculturales enormes, con una crisis de valores extraordinaria y millones de niños mal educados, pésimamente alimentados, que viven fuera de la más mínima concepción de derechos, sin embargo se, que con hombres y mujeres del pensamiento liberal, nos pondriamos de acuerdo en lo que dura tomar un café
Lo que no tendría posibilidad de coincidencias es con el que impide con sus ideas el ejercicio de la libertad, porque si para este trío cuasi cómico de Espert, Milei y Rosales, la manera y el idioma para referirse al otro es el insulto o el agravio fácil, no estamos frente a “liberales”, sino a simples y mediocres fascistas y de éstos, los argentinos hemos sufrido muchísimo.
En 1978 cuando se Fundaba el CEMA, la Argentina vivía por debajo de los estándares más básicos del pensamiento “liberal”, no se le conoce declaración alguna sobre las violaciones a los derechos más básicos, es una pena que un Progresista Radical como el que esto escribe les recuerde lo que pensaba un hombre con mucho talento a diferencia de esos tipos que hemos nombrado, Juan B. Alberdi.
“La democracia es la libertad constituida en gobierno, pues el verdadero gobierno no es más ni menos que la libertad organizada”.
Desde aquí mi homenaje al colega y sobre todo mi reivindicación académica a José Benjamín Gorostiaga, brillante Santiagueño que nos honró con su existencia
Marchamos
Hoy 27 de febrero marchamos por la libertad, su ejercicio pleno, marchamos por el respeto a la vida, marchamos porque somos hijos de momentos difíciles y de ellos hemos aprendido, que no son las palabras las que convencen, sino los simples hechos cotidianos, los detalles del trato diario.
Que hoy seamos millones diciéndole al gobierno que en octubre libremente votaremos para lograr las mayorías necesarias para llevar a la República al orden y la honradez republicana, a pesar de todos los obstáculos que nos pongan en el camino.
Desde San Salvador de Jujuy.
Los abrazo.-