“La felicidad no es un ideal de la razón, sino de la imaginación”.
Immanuel Kant
27 de febrero 2022
Nuestro amigo de esta semana no necesita presentación, pero lo elegí a él, y al tema de la facilidad, en el medio de un conflicto en Ucrania, visto desde un Pais con una administración mediocre, y corrupta en el más claro y definido de sus conceptos.
Discurrir sobre sentimientos básicos del ser humano, es tal vez una salida elegante frente a tanto dolor e incertidumbre, pero piense que si esto está por terminarse, nadie hará nada por detenerlo, y si nuestro destino es continuar el camino, no está mal detenerse un instante y pensar, después de todo en el conflicto entre Rusia y Ucrania, igual que en la lastimosa e inmoral administración del gobierno argentino, se concreta otro pensamiento extraordinario de mi “amigo” Immanuel: “El sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca”, y seamos claros ni Putin ni Fernández se los puede caracterizar de “sabios”, por lo tanto, no esperemos cosas buenas para el futuro.
El mundo observó al presidente democrático de Ucrania Volodimir Zelenski, con ropa de combate y una AK47 en la mano, pidiendo ayuda para su pueblo, en ese momento y gracias a las Redes Sociales lo vio el Mundo entero, dejaron de contar centavos y tomaron la decisión de bloquear económicamente a Rusia, impidiendo el flujo de operaciones financieras y Bancarias entre este país agresor y el Mundo civilizado, la respuesta de Putin es proponer una rendición y poner en alerta defensiva a sus fuerzas nucleares, la verdad es que, sin duda este señor no esta bien de la cabeza, pero recordemos que es el presidente de un País al cual Alberto Fernández hace poco invitó a que la Argentina sea la puerta abierta a este regimen demente y homicida a la gran Familia Latinoamericana.
Putin está loco, no hay duda, pero Fernández compite por el chaleco de fuerza, nos ha puesto en la lista de los peores, de los cómplices y de los corruptos, todo por su propia ignorancia, torpeza y soberbia, es decir demostrándole al 48% de la sociedad la mediocridad de ésta al momento de votar, no olvidemos que no estan alli porque ganaron un “sorteo”, Ustedes amigos lectores deben conocer a muchos que los han votado, deben consumir a periodistas que lo han patrocinado, y seguramente tambien conocen a quienes sin votarlos, eligieron opciones diferentes a las de JxC, en la inteligencia de que estábamos eligiendo una camisa o una falda para salir y no el presidnete de la República, ya es hora de hacerse cargo.
Los dirigentes que apoyaron a Massa, que se queden con Massa, no cambien de espacio, no se angustien, Larreta nunca será presidente.
Dicho esto, brevemente, ustedes se preguntarán: ¿Qué tiene que ver todo esto con la “felicidad” ?, bueno me voy a ocupar del concepto, dentro del contexto establecido.
¿Por qué no intentar algo tan simple como tener momentos de felicidad?
Siguiendo la idea de Kant, dejemos de lado la “razón”, que evidentemente no nos ha jugado buenas pasadas en el ultimo tiempo, y recurramos a la “imaginación”, definiendo a ésta como: “Facultad humana para representar mentalmente sucesos, historias o imágenes de cosas que no existen en la realidad o que son o fueron reales, pero no están presentes, capacidad o facilidad para concebir ideas, proyectos o creaciones innovadoras, en esto último los argentinos somos “buenos”, y pensemos simplemente en pequeñas cosas, en logros humildes pero constantes, no solo para nosotros, no, básicamente para el otro, si somos capaces de imaginar un gobierno desde el 2023, que tenga la suficiente valentía como para usar la imaginación, dejar de lado los consultores, los “amigos” de la prensa, que muchos deberían pensar en buscar otro empleo, por ejemplo la venta de autos usados, de sospechosa procedencia, de eso saben mucho y ponerse como meta la “felicidad” de la sociedad, empezaríamos a mejorar con una enorme rapidez.
Pensé estas cosas despues de leerlo Osvaldo Bazán que hace una brillante descripción de las vacaciones de las autoridades del PAMI, y los que la financian deben sufrir todos los dias para lograr prestaciones muy básica, lo sé, lo veo a diario, .
Después de leer la columna, la cual recomiendo, https://www.elsol.com.ar/opinion/la-patria-es-luana-volnovich se me ocurrió , ya que la politica ha fallado y la comunicación es un “chiste de mal gusto”, porque no recurrir a la filosofía?
Y recordé a Kant, y el planteo de pequeñas e insignificantes victorias, que lleven irremediablemente a un estado de “felicidad”, si bien no permanente, si al menos bastante constante y sobre todo posible.
Y no es dificil, al contrario, es sumamente sencillo, cada uno de nosotros debe dejar por un tiempo de pensar en uno mismo y pensar en el otro, esto te lleva a sacar la basura cuando se debe, ayudar a cruzar a un anciano, trabajar por lo que te pagan, si sos funcionario público, en lo posible si no podes impedir la necesidad compulsiva de corromper y corromperte, no aceptes el cargo, cumplir con la ley, pagar los impuestos, no malversar los impuestos pagados, no es muy dificil, ni siquiera nos somete a un debate “ideológico”, ser felices, es la meta politica de los próximos años, entendida la felicidad como “estado de ánimo de la persona que se siente plenamente satisfecha por gozar de lo que desea o por disfrutar de algo bueno”, por ejemplo el trabajo, hay que administrar la Republica para que la sociedad tenga trabajo, para que estudien contenidos necesarios para lograrlo, para eliminar los obstáculos existentes, sindicatos, intereses corporativos y corruptos, enseñar y aprender, ambos extremos de la ecuación son “felices” si lo pueden hacer, el educador cumple su cometido y el educando se forma para mejores y más remunerados empleos.
Abrir mercados, para que haya empleo, poner al ANSES al servicio de los Jubilados, obviamente si el Estado quiere subsidiar usen el Tesoro como fuente de financiamiento, no una Agencia que deber administrar el dinero recaudado con el trabajo de millones.
Es decir, si el proyecto 2023-2027 debe ser “Hacer felices a los argentinos”, y explicarlo correctamente, será mucho más fácil conseguirlo
Esto elimina que las razones para votar a unos u otros sean “la imagen”, que tipo de ave es, según la opinion de algunos, si son o no hábiles declarantes, solo necesitan ser administradores para otorgar lo unico en que todos los argentinos, sin distinción ideológica o etaria pretendemos, “ser felices” o al menos tener muchos momentos que podamos definir de este modo.
Lo demás es privativo de cada uno, si fulana o fulano no te dan bolilla, si tus hijos o Padres son muy fríos, eso es un tema personal, para eso tenes a los terapeutas, porque yo propongo es la “ideología de la felicidad”, como meta politica
Piénsenlo un poco
Hemos fallado casi en todo, nunca exploramos este simple camino.
Tratemos de pensar en ello.
Tal vez la locura humana solo nos deje escombros, y si alguno sobrevive, su meta será mucho más sencilla, solo vivir.
Los abrazo.
Desde San Salvador de Jujuy.-