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Foto del escritorDr Guillermo Eugen Banzas

Quien no quiere pensar .......


“Quien no quiere pensar es un fanático; quien no puede pensar, es un idiota; quien no osa pensar es un cobarde”.

Recurro nuevamente a mi amigo Francis Bacon porque el comentario de esta semana será destinado a que tratemos de pensar, es decir, que no seamos ni fanáticos, ni idiotas, ni mucho menos cobardes.

La sociedad es el conjunto de esperanzas, necesidades, sueños, inteligencias, mediocridades, grandezas, pero básicamente la sociedad es el conjunto de seres humanos que pensamos; lo podremos expresar o no, pero “pensar” es básicamente involuntario: es el contenido de ese acto de la neuroquímica cerebral, lo importante.


Para pensar de manera ordenada, hay que dotar a este acto involuntario de información; los neurólogos, pero básicamente lo psiquiatras, nos dicen que los “recuerdos”, son la materia prima del pensamiento y lo que no recordamos con precisión lo reemplazamos con la “fantasía” ordenada y coherente, pero fantasía al fin, lo importante es que el “recuerdo” concuerde y a veces esto no ocurre.


Como es lógico, “nos pensamos” colocando al “yo” por sobre el otro, porque después de todo el sujeto “pensante” es uno, y nuestra relación se establece con otro que no necesariamente “piensa” como nosotros o lo que es más complicado, su “mecánica de pensamiento” su materia prima, es más de fantasía que de información dura y pura, de allí es que se producen múltiples problemas y confusiones.

Y si como todo esto no fuera suficiente, se le agregan los “intereses”; es decir al pensar, nosotros lo hacemos por nosotros, para nosotros, poniendo además del conocimiento, la experiencia adquirida, los recuerdos y la fantasía más los “intereses”: esto me conviene pensar, o si pienso esto o actúo como si lo pensara me va a favorecer, o me va a perjudicar.


¿A qué viene este comentario?

Están los más informados de alguna manera hace 7 meses en estado de alerta y hace cuatro meses encerrados, la cuarentena “parcial”, porque nunca vimos una foto del centro de la ciudad de Buenos Aires sin gente como vimos de la Piazza del Popolo, en Roma o del Trocadero en París, siempre gente, en el Gran Bs As ni se enteraron, pero aun así los comercios se cerraron, miles de puestos de trabajo se perdieron irremediablemente, porque en vez de cerrar fronteras, aislar a los que regresaban, tomarles la temperatura, hicimos lo contrario: Ginés González García “pensó” que no llegaría tan pronto, desde tan lejos, es decir el Gobierno no “pensó” que había miles de argentinos en Europa, Asia, aún en China o en Centro América y que podían regresar contagiados y/o asintomáticos, solo “pensó” que con una declaración Jurada era suficiente.


¿Que hubo en la mecánica del pensamiento oficial? : Información, conocimiento o sólo fantasía y ver qué les convenía, es decir ¿cuál era su interés?

Declarada la Pandemia a mediados de Marzo, la Administración de Fernández concentró en ellos las compras, las políticas, las decisiones, claro las consecuencias las pagarán otros, su único interés declarado fue siempre la Provincia de Bs As, y no toda, sólo el Gran Bs As, pero ésta seguía siendo una fiesta de mercados callejeros, manteros y de millones de personas viajando a sus trabajos en CABA si aún los tenían, amontonados en trenes o colectivos, miles de fotos tomadas por los mismos ciudadanos en los medios de transporte lo atestiguan, mientras nos hablaban que la Pandemia tendría un pico algún día, ya que la verdad nos querían tranquilos y en casa, porque de este modo gobernaban sin debate, por medio de los DNU, léanlos, los primeros sobre todo, son para sólo con ellos iniciar una investigación de carácter administrativa, pero ya se hará más adelante o nunca, este país es “vivido”, nunca “pensado”, cuando lo hicimos estábamos en el Mundo, pero cuando la fantasía reemplazó a los recuerdos o nuestros intereses interrumpieron el flujo de información pensamos en otra cosa, así votamos y acá estamos, nadie salvo nosotros somos responsables.


Si le creímos a los periodistas que hablaban del “moderado” a un señor que le pegaba a un anciano en un bar o insultaba a los que después terminaron siendo sus votantes en las Redes Sociales, no es culpa de ellos, es nuestra que le creímos.

El periodismo “pensó” en sus intereses, las Empresas periodísticas lo mismo, muchos que se quejaban y operaban a diario a Marcos Peña haciendo que la gente que ni sabía de qué trabajaba lo terminara odiando, ahora se están enterando que fue el señor que les saco la pauta a muchísimos periodistas estrella.

Nos enteramos que periodistas a los que ellos mismos definían como “influyentes” terminaban siendo funcionales a lo peor del kirchnerismo mandando cartitas, denunciando a otros periodistas.

Nos enteramos de que el odio del “Círculo Rojo” hacia el ex Presidente fue porque no influyó en la Justicia, y ésta los procesó a muchos de ellos por cohecho, es decir por pagar coimas, a la administración de Néstor y luego la de Cristina Fernández, ¿que pretendían, que el Presidente los salvará de haber cometido un delito?

Es decir, estamos como estamos en el fondo porque la argentina y sus dirigentes “piensan mal” sus mecánicas, sus maneras, solo preservan sus intereses.


Operación: Beto, fue

Estamos en presencia del peor desgaste que sufre un Presidente desde la recuperación de la democracia, y nada tiene que ver con esto la Pandemia, ésta sólo lo puso en evidencia.

Alberto Fernández se dejó humillar desde el primer día, la vice presidente casi le arruina el momento más importante que tiene un político en su vida, que es asumir la presidencia, tuvo la enorme suerte que el mando se lo traspasó un caballero como Mauricio Macri, sino no, ni la banda recibe.


Su gabinete, es una multitud variopinta de fanáticos que cumplieron algún rol durante la oposición a Macri, si no había un Ministerio se lo crea, si no hay funciones se las inventa, lo cierto es que mayoritariamente llenaron el Estado con militantes de la Campora, que además de ser jóvenes, son básicamente incapaces y la manera más rápida de probar a un incapaz es darle una responsabilidad, mientras no la tiene, se puede sospechar de su inutilidad, pero cuando tienen que administrar, la duda desaparece y la convicción de que estamos en manos de incapaces se hace evidente.


Fernández es operado por dos fuerzas enfrentadas aparentemente o eso pretenden que “pensemos”, pero en mi caso no acompañó esto de que él es “bueno” y que Cristina es “mala”, de esto último nadie tiene dudas, lo cierto es que la idea de la viuda de Kirchner evidentemente es aliviar o eliminar los obstáculos judiciales que la tienen en una posición desagradable a ella y a sus hijos, recordemos que las bendiciones de Cristina la acompañan amorosamente a la madre en varios procesos.


No hay manera que Cristina escape de las imputaciones sobre Irán, el Pacto, el encubrimiento, porque son crímenes de lesa humanidad, de los Hoteles es difícil, puede aletargar las causas, la Obra Pública junto a su amigo Báez, está ya encaminada por orden de Casación que al menos se hagan tres audiencias semanales.

Pero el reproche es que aún siguen embargados: ella y sus hijos, y le endilga al Presidente que teóricamente no debiera meterse, pero Fernández se mete, hace comentarios, se contradice, toma decisiones, las revoca, cuando alguien le recuerda que no está en línea con el Instituto Patria, que vendría a ser la “cueva”.

Al principio eran llamadas telefónicas, me dicen que al estilo Cristina - Parrilli, pero la Vice ya se cansó, y si el Presidente se reúne con Empresarios, Hebe de Bonafini, que quiso serlo, junto al parricida de Sergio Schoklender en el Gremio de la Construcción, lo llama públicamente “traidor”, y que se junta con “los cómplices de la Dictadura”, menos mal que Néstor no está vivo sino preguntaría ¿“Por qué me decís eso?”

Lo cierto es que el Presidente en vez de ignorar a una Señora que ya no simboliza nada más que el odio y la decadencia, le manda una carta y le pide disculpas.

Tiene en el medio de una difícil negociación con los Bonistas donde necesita de EEUU, un gesto menor de que un Embajador califique al Gobierno de Maduro por lo que es, y el que lo sale a insultar es un locutor Uruguayo ya estamos en la descomposición general.

Y solo han pasado unos meses.


Saldremos de la cuarentena por la ventana del baño, a ver qué pasa, los mayores de 70 o que tengan problemas de salud, diabetes, sobrepeso, fumadores, asmáticos, inmunodeprimidos, etc., no se muevan de sus hogares, porque en los próximos días millones de asintomáticos nos pueden rodear o no, porque lo más grave, es que no lo sabemos.


Empezamos esta reflexión con el concepto de pensar.

Yo sugeriría que nos serenemos y tratemos de cambiar la mecánica de nuestro pensamiento, agregando datos, mirando comportamientos, recordando historias, viendo cómo los que declararon contra Cristina son asesinados y sus bienes embargados por su relación con la corrupción de ella.

Miremos lo que en unos días pasará en el Caribe, dónde nos queremos colocar en el Mundo, cómo queremos que nos relacionen, qué queremos consumir, si queremos recuperar los trabajos o ver que los esfuerzos impositivos son para mantener gente que renunció a buscar empleo, simplemente porque el Estado los mantiene.


Pensemos esas cosas, y en cómo resolverlas, eliminemos la “fantasía”, no son mejores, no volvieron mejores, no piensan en nosotros, solo en ellos.

Cada día que nos autoconvocamos para una marcha somos más, y esto no es casual, la memoria de una argentina mejor está fresca.

No hay un “neoliberalismo” malo y una Revolución Nacional y Popular buena.

Hay una asociación ilícita a la cual votaron para lograr la impunidad y de paso seguramente seguir cometiendo delitos.

No somos fanáticos, ni somos idiotas, y tengan muy en claro que tampoco somos cobardes.

Somos una sociedad que pensamos y ya nos estamos cansando de cómo piensan los que nos gobiernan.

Los abrazo.

Desde San Salvador de Jujuy.

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